En los talleres se trabaja, por un lado, con personas mayores con grado de demencia avanzado que acuden a los distintos recursos de Fundación Felipe Lecea, así como con alumnado de las etapas de secundaria de distintos centros escolares de Altsasu/Alsasua.
Los proyectos en los que se fomentan las interacciones intergeneracionales permiten desarrollar experiencias que mejoran, por un lado, la identidad en las personas mayores, ya que en este tipo de talleres aumenta su interacción social y su movilidad, y por otro, la empatía, tolerancia y habilidades sociales en los más jóvenes.
Además, en este caso, a través de esta relación compartida, los mayores aprenden a emplear mejor las nuevas tecnologías y a conectar en una misma línea del tiempo, pasado, presente y futuro de la comarca de Sakana.
Se espera que este programa se implante este año como proyecto piloto y el que viene de manera definitiva en el centro y que así, al menos 365 personas entre ambos colectivos, se puedan beneficiar del mismo de manera directa e indirecta.
El proyecto “Solos, pero no en el olvido” ha recibido el apoyo de Banco Santander para su puesta en marcha.